Apenas unas semanas después de que Waymo anunciara que trasladaría su servicio de robotaxi a Londres en su primera expansión europea, la compañía propiedad de Alphabet acaba de revelar que también se mudará a tres nuevas ciudades de EE. UU.
En una publicación en X el lunes, Waymo dijo que sus taxis autónomos pronto llegarán a las calles de San Diego, Detroit y Las Vegas.
Si bien aún no se ha revelado una fecha exacta de lanzamiento, se espera que el servicio de robotaxi comience a pagar a los pasajeros en algún momento del próximo año, utilizando la aplicación Waymo para reservar viajes y administrar sus cuentas.
Waymo ya está probando sus vehículos autónomos en estas ciudades para aprender más sobre su desempeño en diferentes condiciones climáticas y de tráfico, siendo la nieve y el hielo un desafío importante en Detroit. Y sí, en Las Vegas se espera que el área de servicio de los robotaxis de Waymo incluya la famosa franja, con una extensión hasta el aeropuerto de la ciudad también en juego.
La empresa ya cuenta con la licencia necesaria para operar en California, pero para Detroit y Las Vegas aún necesita el permiso necesario de los reguladores de Michigan y Nevada, respectivamente.
«Seguiremos nuestro marco de seguridad y atenderemos a los pasajeros en estas ciudades una vez que hayamos validado adecuadamente nuestra tecnología y obtenido los permisos necesarios, con la intención de abrir nuestras puertas a los pasajeros el próximo año», dijo a The Verge el portavoz de Waymo, Sandy Karp.
Waymo opera actualmente en el Área de la Bahía de San Francisco, Los Ángeles, Phoenix, Austin y Atlanta, y también planea lanzar servicios piloto en Miami, Washington DC y Denver, entre otros lugares.
Además de Londres y un número cada vez mayor de ciudades estadounidenses, Waymo también planea operar en Tokio, donde, al igual que en Londres, sus autos sin conductor tendrán que conducir por la izquierda, en carreteras que a menudo son más estrechas y sinuosas que en Estados Unidos.
Aquí hay una lista de otros desafíos emocionantes que esperan a la robótica de Waymo cuando llegue pronto a las calles de Londres.












