Raquel Ray estaba de buen humor la semana pasada mientras presentaba su evento Burger Bash en Food Network en el Festival de Comida y Vino de la ciudad de Nueva York, pocos días después de que dijera que tenía “cascadas feas”.
Ray, de 56 años, apareció en el escenario con un hombre. Juan Cusimanoagradeció a la multitud por asistir y anunció el ganador de la competencia anual.
Cuatro días después del evento del 18 de octubre, Ray lanzó su primer episodio “Dormiré cuando muera” podcast. En el episodio del 22 de octubre, que pudo haber sido grabado, explicó cómo su reciente caída le impidió hacer las tareas del hogar.
“Soy un hombre de familia. Me gustan mucho las tareas del hogar”, le dijo a su invitado. Jenny Mollen. “Me gusta lo que la gente considera un oficio. Me encanta preparar la cena, planificar la cena, hacer listas. Me gusta el trabajo manual, ayudo a cargar la madera”.
Continuó: “Tuve una fuerte caída hace unas semanas, así que hace tiempo que no hago eso.
Su admisión se produce un mes después de que publicara un vídeo sobre su canal de instagram en el que parecía tener pelos en la lengua. La comisura de su boca también parecía estar caída, lo que llevó a los comentaristas a creer que había sufrido un derrame cerebral menor.
“Por favor, detente. Envejecemos, nuestras caras cambian, algunas mujeres no están maquilladas”, escribió otro comentarista, saltando en su defensa. “Tengo ATM, lo que hace que se me cuelgue un poco la boca. Decir que tiene un derrame cerebral es una falta de respeto. A menos que lo sepa y se lo cuente a todos, creo que está mal jugar a adivinar”.
Ray también admitió en su podcast que a veces se pelea a gritos con su marido.
“Es muy difícil poder calmarlo, especialmente para las personas que están muy enojadas, o son creativas o ruidosas”, dijo, pero creo que está bien, realmente no confío en la gente tranquila.
“Me asusta demasiado silencio”, añadió. “Preferiría que me dijeras qué estás pensando cuando lo estás pensando y podemos hablar de ello”.
Ray lanzó su podcast a principios de este mes y dijo: “’Leeré cuando esté muerto’ (¡de verdad!) trata sobre los viajes de la vida y lo que nos mantiene adelante. No tiene guión, es crudo y real. Trabajar me inspira, conectarme con la gente me inspira y esta plataforma me permite tener una conexión y una conversación más personal, lo cual es muy inspirador”.