Unos días antes de las elecciones presidenciales, la Corte Suprema de Estados Unidos perdió ante los republicanos en un caso relacionado con las reglas del voto por correo en el estado de Pensilvania.
Los tribunales han rechazado solicitudes de no contar las boletas provisionales utilizadas en estados donde es probable que la boleta de un votante esté defectuosa.
Estas boletas provisionales se guardan por separado y se cuentan solo después de la verificación.
Los republicanos querían que estos votos no fueran contados.
Eso podría potencialmente invalidar miles de votos ausentes, que a menudo se inclinan hacia los votantes demócratas.
La orden judicial permite que esos votos se cuenten por ahora, pero la Corte Suprema podría volver a examinar la cuestión más adelante.
Es posible que en los próximos días se produzcan más disputas legales.
Se espera que las batallas por la validez de los votos continúen después de las elecciones del 5 de noviembre, especialmente en estados donde la diferencia entre un ganador y un perdedor puede ser de tan sólo miles de votos.
El candidato presidencial republicano Donald Trump ya ha planteado acusaciones sin fundamento de manipulación de votos después de su derrota en las elecciones de 2020 y ahora cuestiona la integridad de las próximas elecciones.
La decisión de la Corte Suprema en Pensilvania, un estado clave en el campo de batalla, es de particular importancia.
Con 19 electorados, el más poblado de los siete llamados estados indecisos podría ser decisivo en el resultado de las elecciones.