El conflicto en Oriente Medio se intensificó el martes cuando Irán disparó cientos de misiles balísticos contra varias zonas de Israel, incluida la capital de su estado, Tel Aviv.
Los informes indican que, si bien algunos de los misiles fueron interceptados por la Cúpula de Hierro, muchos otros cayeron, incluso en zonas densamente pobladas.
El ejército israelí confirmó en un comunicado que “hace algún tiempo se dispararon misiles desde Irán contra Israel”.
Se activaron sirenas antiaéreas en todo el país, incluidas las principales ciudades como Jerusalén y Tel Aviv.
Se escucharon fuertes explosiones en Tel Aviv, cuando los sistemas de defensa aérea de Israel interceptaron muchos cohetes entrantes e iluminaron el cielo.
Según la declaración de la Guardia Revolucionaria de Irán, el ataque con misiles fue en respuesta al asesinato del líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, del líder político de Hamas, Ismail Haniyeh, y de un comandante iraní.
Irán ha advertido que en caso de un ataque a su país, habrá otros ataques con misiles.
El ataque con misiles se produjo apenas un día después de que las fuerzas israelíes lanzaran un inusual ataque terrestre en el sur del Líbano, dirigido a Hezbolá, una milicia respaldada por Irán.
Hezbollah, que ha estado en conflicto armado con Israel durante décadas, respondió con ataques con misiles contra objetivos israelíes, incluida la base de Glilot cerca de Tel Aviv, sede del Mossad, la agencia de inteligencia de Israel.
Las autoridades estadounidenses apoyaron firmemente a Israel ante este ataque.
Un alto funcionario de la Casa Blanca advirtió que cualquier ataque directo a Israel tendría “graves consecuencias para Irán”.
El presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris celebraron el martes reuniones de emergencia con funcionarios de seguridad nacional para discutir planes para ayudar a Israel y proteger al personal estadounidense en la región.
Estados Unidos también comenzó a desplegar tropas adicionales en Medio Oriente, enviando miles de soldados para reforzar los 40.000 ya estacionados en la región.
La situación sigue siendo volátil y tanto Irán como Israel continúan intercambiando amenazas.
El ejército de Israel ha llamado a brigadas de reserva adicionales para reforzar su frontera norte y está llevando a cabo ataques aéreos contra objetivos de Hezbollah en el Líbano, lo que aumenta el riesgo de un conflicto regional más amplio.
Les recordamos que Hassan Nasrallah, líder de Hezbollah, fue asesinado el fin de semana pasado en un ataque selectivo por parte de Israel, lo que provocó reacciones internacionales en el contexto de la amenaza de un ataque de represalia por parte de Irán.
