Los arqueólogos han descubierto un refugio rocoso en el valle de Zeravshan en Tayikistán que estuvo habitado por varias especies humanas, incluidos neandertales, denisovanos y Homo sapiens, durante más de 130.000 años. Descubierto cerca del río Zeravshan en el corredor montañoso del Asia Interior (IAMC), el sitio, conocido como Soii Havzak, ofrece nuevos conocimientos sobre los patrones migratorios de los pueblos antiguos. Los investigadores creen que el IAMC puede facilitar las interacciones entre estos grupos, proporcionando información sobre cómo viven y sobreviven en Asia Central.
Descubrimientos cerca del río Zeravshane
Un equipo dirigido por el Dr. Yossi Zaidner, profesor titular del Instituto de Arqueología de la Universidad Hebrea de Jerusalén, excavó recientemente el sitio. Se encontraron evidencias de diversas actividades humanas, incluidas herramientas de piedra y huesos de animales, de hace 150.000 a 20.000 años. Zaidner señaló que la IAMC de Asia Central habría servido como ruta de migración natural, permitiendo que distintas poblaciones se cruzaran. “Este descubrimiento “Es importante para comprender la presencia de humanos antiguos en Asia Central y cómo diferentes tipos de personas pueden haber interactuado aquí”, dijo en un comunicado de prensa.
Importancia para la migración humana y la cooperación
Los artefactos de Soii Havzak, incluidas hojas de piedra, escamas de piedra, pedernal y señales de uso de fuego, sugieren el uso de equipo de protección por parte de diferentes grupos de personas. El hallazgo resalta la importancia de Asia Central en las antiguas rutas migratorias, y el río Zeravshan puede haber servido como ruta para los primeros humanos a medida que se expandían por los continentes.
El camino hacia la civilización antigua
Más allá de su importancia prehistórica, el valle de Zeravshan se convirtió más tarde en una ruta importante en la Ruta de la Seda, que conectaba naciones distantes como China y Roma. Los investigadores esperan que nuevos estudios en Soii Havzak arrojen luz sobre las implicaciones más amplias de la región para las migraciones humanas antiguas y las interacciones interculturales, con el objetivo de profundizar la comprensión de la historia y la evolución humana durante el Paleolítico Medio.